El 21 de septiembre retomamos nuestros grupos de apoyo tras el verano con una charla sobre ejercicio y espondilitis anquilosante.
Víctor Fernández Pérez, entrenador personal de SportiaGimnasios, nos contó los beneficios del ejercicio físico para la espondilitis anquilosante, con consejos importantes a tener en cuenta cuando lo realizamos. También explicó como se realizan los entrenamientos guiados que AFAea organiza en en Sportiagimnasios, grupo que dirige él personalmente
La charla empezó con su presentación y después quiso conocer a los socios que asistieron, conocer el grado de actividad deportiva que hacían y como se sentían después de practicarla
La espondilitis anquilosante genera inflamación, fatiga, rigidez y dolor en columna, caderas y hombros entre otros de sus síntomas. Víctor nos explicó la importancia del ejercicio físico para rebajar los niveles de inflamación, dolor, rigidez y fatiga, a la vez de mejorar flexibilidad, movilidad y ganar masa muscular.
¿Qué es el ejercicio físico?
Nos explicó que practicar solamente piscina, yoga, pilates, andar… por separado, sin nadie que supervise, sin controlar intensidad… que está bien, pero eso no es ejercicio físico.
Ejercicio físico es la actividad física que se realiza con el objetivo de mejorar el “rendimiento” cumpliendo 3 requisitos:
- Planificada por un profesional
- Estructurada
- Repetitiva
Rendimiento se refiere a la hora de enfocar la actividad física no a lo profesional si no a lo que queremos conseguir de ella: ganar fuerza muscular, reducir fatiga, obtener una buena condición física, mejor movilidad…
Herramientas a tener en cuenta
En el ejercicio físico hay que tener cuidado de no pasarse, una intensidad inadecuada, más frecuencia de la soportada podrá causar más inflamación y no tendremos el efecto antiinflamatorio, tendremos agujetas, no podremos ni movernos eso llevará a desmotivarnos y no hacerlo de continuo. Por eso es fundamental contar con un profesional cualificado a la hora de realizarlo..
Las herramientas para la actividad física son:
- Fuerza
- Resistencia
- Velocidad
- Flexibilidad
- Equilibrio
- Movilidad
Todo bien organizado nos llevará a una buena composición corporal y evitar lesiones
Con la espondilitis anquilosante hay que personalizar los entrenamientos a los pacientes, y se recomienda ejercicio de bajo impacto para que las articulaciones no sufran.
Se recomienda que sea variado y al menos 30 minutos al día
La importancia de trabajar la respiración en la espondilitis
También nos habló de la importancia de la respiración y cómo influye en nuestra columna y órganos.
Practicamos la prueba “Hilo Test”. Para realizarlo pones tu mano derecha en el pecho y la izquierda en el obligo y respiras durante 3 minutos. Inspira en 3” y espira en otros 3”. Si al final del ejercicio suben las dos manos o la derecha es que nuestro patrón respiratorio no es el correcto. El patrón respiratorio correcto es el que sube la mano del ombligo ya que el que se encarga de respirar es el diafragma, este es el encargado de respirar.
Comentó las diferentes técnicas que hay para practicar la respiración.
Y para finalizar nos indicó como se enfoca en Sportiagimnasios el ejercicio físico a los pacientes con espondilitis, como lo estructura, las partes… como adapta a cada paciente y que se intenta que en los entrenamientos sean variados para conseguir los objetivos.
Puedes ver la charla completa en este video: